Hanuman Chalisa
40 versos en glorificación a Hanuman. Autor: Tulasidas.
Traducción al español: Srila B.V. Atulananda Acarya.
1.- Con el polvo de los pies de mi guru limpio mi mente,
Y canto la gloria de Raghu que bendice clemente.
40 versos en glorificación a Hanuman. Autor: Tulasidas.
Traducción al español: Srila B.V. Atulananda Acarya.
1.- Con el polvo de los pies de mi guru limpio mi mente,
Y canto la gloria de Raghu que bendice clemente.
Canto de Sri Rama
Oro primero y medito en los sadhus,
que así bendecido sea un día yo cualificado.
Anacaona
Anacaona, heroica Reina,
Anacaona, brilla aún tu gloria.
Hubo una mujer muy bella,
cuenta así la historia,
llamada Anacaona,
noble, valiente guerrera.
Cuando a esa Flor de Oro,
la deseó el invasor,
con amistad y amor,
quiso ella responder a esa sed
de riqueza y poder.
Tu río, tesoro y sol,
todo te fue deseado,
todo ha sido vejado,
no está más ya tu valor.
Fue Ovando y su bando,
con sus perros, fuego, caballos,
los que fueron desangrando,
a tu pueblo amado,
con tus hijos cual niños,
que solo querían amar.
Y clavaste en tu corazón la daga,
de la castidad, libertad y honor,
reina heroica hasta hoy se aclama,
tu triunfo sobre el español.
Tributo también a Caonabo,
Tu heroico esposo guerrero,
Por tu enemigo traicionado,
Grande sea vuestro recuerdo.
_____________________________
Donde hubo una flor,
Clavaron un puñal,
Donde brilló el oro,
Quedó la sangre de un niño.
Arrepiéntete europeo,
De tanto crimen cometido,
De tanto loco deseo,
Llegaste a un paraíso,
Mas tu sed por el oro,
Eclipsó toda bella ,
Y solo dejaste el lodo,
De tu diabólica cultura.
Aquí oro, oro, oro, aquí lloro, lloro, lloro,
por los que lucían plumas,
besaban su tierra sagrada,
Por los que reciben bala,
los que hemos dejado pobres,
por los que aún nos llaman,
“sus hermanitos menores”.
Aquí oro, oro, oro; aquí lloro, lloro, lloro
Aquí oro, oro oro; oro al Señor del cielo,
¿Qué hizo ese inocente? ¿Por qué en ese infierno?
Ven pronto, sé clemente; es mi humilde ruego.
¿Qué han hecho estos inocentes? Solo Tú, Señor, lo sabes,
Los llevas donde Tu gente, donde aquellos que los amen.
Vive abatido el hombre, en muy horribles ciudades,
Veo caer en nosotros, el peso de esa invadida sangre.
Veo caer en nosotros, el peso de esa abusada sangre.
Cuida, cuida el nativo hermoso, cuida el río y su lago,
cuida el cerro, es sagrado, todo lo que da reposo.
Cuida, cuida el nativo hermoso, ya quitarán de sus manos,
todo lo que era nuestro, todo lo que tanto amamos.
Sé que nos recibiste con un abrazo
Sé que nos sonreíste cuando llegamos
Sé que nos dieron oro a cambio, de espejos rotos
Sé que nos pagaron por “cazarlos”. ,
Por encarcelarlos y exhibirlos en tierra europea.
Sé que trajimos morenos como esclavos,
que fueron torturados y vilmente vendidos.
Para que el hombre blanco ponga azúcar en su té,
se quedó sin alma usted, sin familia ni tierra;
hoy somos la alcurnia ya ve,
nos quedamos hasta con tus pisadas;
llevamos sangre hermana, del mismo rojo el color,
del mismo blanco el alma, que a ti te niegan,
con tus tierras y plegarias, tus sentires y bandera,
con la que invitas a que vengan los que aman.
Sé que hemos sido malos, que nos bañan mil pecados,
¿Qué hacer?, quiero ser tu hermano, devolverte ese abrazo,
que hace quinientos años, te costó, a ti, la muerte.
Mira nuestra suerte,
somos nosotros los que ahora pagamos,
sirviendo como allegados
a esas empresas que hoy invierten
en las tierras que cruelmente les robamos.
Guerra fría disfrazada, de globalización, libre comercio,
nos dejarán sin nada, los que ostentan altos puestos.
Sé que hemos sido malos, que hicimos mil pecados.
¿Qué hacer?, quiero ser tu hermano, devolverte ese abrazo,
que por ahora no darlo, perdemos la vida.
Amor propio
Este es un tema interesante y lo he meditado varías veces. Amor propio es amor por el alma porque eres alma. Amor propio es desearse un bien eterno, un amor superior, una felicidad trascendental. Esto es amor propio y gracias a ese mismo amor propio uno tendrá la suficiente inteligencia como para darse cuenta que con esta mente e inteligencia materiales no llegaremos a buen puerto. En el CC se dice que es como pretender cruzar el océano tomado de la cola de un perro, o es como subirse a un bote de piedra.
El tonto pensará que de ese modo podrá cruzar el mar del dolor, pero el inteligente sabe que necesita de una embarcación especial que solo guru y Krsna se la pueden dar. El que tiene verdadero amor propio busca su supremo bien y entiende estas cosas. El que solo quiere disfrutar aquí y ahora, sin importar el futuro de su alma, es alguien que no sabe quererse porque si no sabe quién es él, ¿cómo podrá tener amor propio o autoestima?
Amor propio es sentir que puedo ser mucho más y mejor. Es justamente no contentarme con lo que soy ahora porque confío en que por la gracia del Supremo puedo crecer más. Porque el amor por naturaleza es creciente, alegre, positivo y expansivo, el amor hacia mí mismo me invitará a crecer más y más. Me hará proyectarme más. No me estancará en un conformismo insuficiente y decadente.
Si alguien dice que se quiere y que se acepta tal como ahora es, es una persona alienada, enjaulada por propia decisión. Amor propio es sentir que puedo mucho más, tanto más porque mi pequeño e insignificante amor podrá un día unirse y participar del grande e infinito Amor del Supremo. Mi amor propio estará lleno de positiva proyección y esperanza. Quien no tiene amor propio se coarta. Es alguien con complejo de inferioridad. Es como una grande y poderosa ave que se decide incompetente para volar.
Amor propio es también saberse amado. El que se sabe amado por el Supremo está en la posición más pura, elevada y sabia. Se sabe amada por el Supremo porque anda en busca del verdadero amor.
La flauta de Krsna
1
Su bella sonrisa, de dulce amor,
se hizo música,
la que emanada del recto y sencillo bambú,
originó universos,
con almas vestidas de materia…
Y esa música de amor,
esa sonrisa amorosa vuelta mágica melodía,
llena el éter de ese Su creado espacio,
queriendo despertar las conciencias que yacen dormidas…
Desde el molusco llama,
hasta el cielo de los devas,
sin dejar escapar a nadie del amoroso encuentro…
Allá arriba, están Sus brazos abiertos,
aquí abajo, hermano,
la sonrisa siniestra y la guadaña…
Viaja el sabio en esa música.
En su vida, todo se ha vuelto encanto.
Te invita siempre a escuchar Su sinfonía,
la que en el planeta Sol, un día fue entonada…
Abraza universos, hombre de piedra,
bípedo salvaje, neciamente engreído;
abraza amores, hermano querido,
dormido en las fauces de la burguesía…
No te dejes marchitar, no te dejes herir,
sé amable, no seas violento,
prueba la droga del amor divino,
prueba la luz del recóndito misterio,
gracias al cual, ¡eres ser vivo!
2
Te invito a cantar, te invito a sentarte,
ven a contemplar el regalo de nuestro Tata lindo…
Tienen para ti su elenco esas nubes,
que danzando navegan en el cielo infinito…
Para ti se ha formado esa bandada de pájaros,
para ti los jardines naturales han hecho racimos…
Todo ello, ¿sabes?, porque hay un Ser que te ama,
pero no has salido a encontrarte con Su dulce caricia,
no fuiste a probar la corriente del río,
no has salido a rozarte con el silbido del viento…
No montaste al caballo, no abrazaste al cordero,
no te llevó el padre buey en su mansa carreta,
no arrancaste la papa, no cortaste la fruta,
no descubriste tú también el oculto regalo de la tierra…
Todo lo sacamos de un «súper» mercado frío,
en una bolsa de plástico nos plastificaron,
en una botella de plástico te llevas llorando a casa
el canto del río,
y en música envasada escuchas el trino
de tu hermano pajarito…
Eres un profesional, eres un empresario,
que sueña contar un día con un jardincito florido;
llenos de envidia sacamos de su terruño al campesino,
para forzarlo a vivir en sucios suburbios,
y que atiendan las necesidades del urbano egoísmo…
¡Y a pagar el precio del dolor se ha dicho!
Por ser fieles serviles del poderío empresario…
¿Dónde está la tierra, dónde está la leche,
dónde se han ido los buenos hermanos?
¿Dónde está el buey, dónde está el caballo?
La avioneta asesina no mutiló a tu hijo en el vientre
con su lluvia química,
por eso te duermes frente al televisor encendido,
y te burlas del amargo grito del desposeído….
3
Y así dormido, te pierdes,
hermano, se te va otra vida…
Pasas la existencia como muerto,
sin haber en verdad amado…
¿Por qué no das tu dulce fruto?
¿Por qué no aprendemos del insecto abejita?
¿Por qué no somos estrella que brilla?
¿Por qué no somos sol que alumbra y tempera?
Para ti, hermano, para ti está la sonrisa del Amado.
Para ti sopla Él su dulce flauta exquisita.
¡Es como un beso eterno!
¡Es como un beso eterno e infinito!
Curvado en tres, como la senda del amor al que te invita.
¡Es el destino de toda existencia!
Con Su música te busca.
Con Su sabiduría te alienta.
Con Su amor te da la vida.
¿Cómo olvidamos tan rica herencia?
¡Que nada apague el fuego de tu espíritu!
Aventúrate por esa senda, hermano querido,
hermano callado, hermano en el olvido.
Recorre la senda del amor de acuerdo a
tu clamoroso pálpito interno.
¡Mira la riqueza de tu ser!
¡Mira que ya eres rico!
Sólo el de escaso espíritu te señala como pobreza
esa misma riqueza abrazada por los cristos.
(Sri Krsna sonríe pícaramente y lleva Su flauta a Sus labios,
anticipando Su encuentro con Sri Radha…
Y con esa misma sonrisa, y con esa misma flauta,
crea los mundos y nos llama…)
Por: Atulananda Swami
Creo en los que creen,
porque no creen, sino que entienden
Entienden o perciben, perciben o sienten,
Es una clara corazonada, es ya un llamado divino,
Es una necesidad imperiosa por lo más alto
Es un insostenible disgusto por lo que aquí se prueba.
Los que creen, tienen otros ojos,
Tienen otros sentires,
Están vivos, están despiertos,
No pueden dejar de ser consecuentes,
La voz de la conciencia superior truena como estrepitosa exigencia en sus corazones.
Les duele mucho el mal, no pueden hacerlo,
No pueden mentir, no pueden robar, mucho menos matar,
No pueden ver sufriendo a otros.
Saben que hay perspectiva, saben que hay futuro,
Saben que se trasciende la muerte,
Saben que se puede ser más fuerte que el dolor y que todo lo adverso.
Los que creen, creen en el amor, creen en la sabiduría, creen en el bien,
Creen en la amistad, en lo solidario.
Son sanos, son positivos, no hay imposibles cuando de algo bueno se trata
Los que creen están bañados en bondad, sí, en bien, en esperanza, en selectos triunfos
Los que creen tienen una conexión especial con la Verdad, con lo que es bueno, con lo que es sincero, y se comprometen con todo ello.
Los que creen se encuentran con la luz de la certeza y la dan a otros,
Crean mundos, crean misiones, crean sociedades de bien con el ardiente fuego de la generosidad y la pureza.
Los que creen te sacan del dolor, del temor, de la angustia
Le dan razón, destino, fin a tu vida
Se proyectan más allá de los cielos de ángeles y arcángeles,
más allá de los dioses y de las cautivantes musas
más allá de las ciencias y de las artes que atan a estas esferas
Más allá de las bellezas, más allá de los encantos, más allá de los amores,
más allá de las encendidas estrellas, de los poderes, de los grandiosos soles,
Se proyectan hasta alcanzar la flor de eterno aroma, el amor que no se sacia,
los bienes, las alegrías y los saberes que por siempre perduran
Ellos se sostienen solo en lo real, en lo eterno,
Ellos se preocupan por ti, te despiertan, te conquistan y te invitan para siempre a sus Casas.
Y serán tus amigos de siempre, les abrirás tu corazón, les regalarás tu vida,
¿Existe o no existe el bien? ¿Existe o no existe la Verdad?
¿Existe o no existe la dicha suprema?
Para ellos no hay duda,
¡Sus existencias son tan reales que no puedes dejar de buscarlas!
¡Tu plena conciencia solo aspira por esas riquezas!
Sí, porque es natural a la conciencia el crecer, el proyectarse,
el llenarse de esperanza, porque ésta es parte de esa conciencia sana
que crece y se expande como un florecido rosal,
o como un almendro que cargado de flores anuncia sus frutos.
Unos creen en esos tesoros y otros no creen.
Los que creen quieren probarlos en su más alta cumbre
Los que no creen tratan de conformarse con sus sombras.
Yo ya probé esas sombras. En esta vida hasta mis veintiún años.
¿Pero quién puede nutrirse de ellas?
¿Quién puede quedar conforme?
Ya probé el mundo de los que no creen.
En ese mundo fui criado, fui formado,
Me obligaron a creer en lo increíble,
Me obligaron a creer en los que no creen.
Y los que no creen me muestran sus máquinas y su ciencia
Y me plantean sus complejas especulaciones.
Pero yo solo los veo confundidos y dudosos,
Lanzando una teoría al azar,
Muchos buscando la fama y el dinero más que la Verdad,
Y todos ellos frustrados y en amargura.
Los que no creen, creen en lo muerto
Creen en la frustración y en el sufrimiento,
Creen en lo que muestran sus sentidos,
Creen en un mundo inferior que los angustia y a él se apegan
A él le cantan, con él se embriagan, con él se insultan, se matan o se suicidan
Es así el mundo de los que no creen.
Son como el ciego que solo percibe lo que toca.
Los que no creen, creen en el hombre,
Creen en el científico y en el político,
Creen en algo muy obsceno, vago y pobre, a lo que llaman cultura,
Creen, a veces, en sus familiares y amigos,
Pero no tardan en frustrarse.
Los que no creen no tienen futuro ni destino,
Solo dan vueltas en sus mismas embriagueces
Son peligrosos porque quieren arrastrarte a sus frustraciones y amarguras
Y quieren apagar tu entusiasmo a toda costa
Si crees, eres una amenaza para los que no creen,
Eres una amenaza para sus sistemas educativos y económicos
Para sus supuestas artes y ciencias
Porque ellos quieren que permanezcas en el mundo de los ciegos
Ellos, que ni les da para ser tuertos
Tan cerca está la liberación,
Tan cercana la sabiduría
¡Están a solo un paso del hombre!
¿Pero quién te animará a dar ese paso?
¿Quién te enseñará a darlo?
Tú sabes, solo un conocedor de la luz,
Solo un saboreador de grandes manjares
Solo una persona bella con verdadera cultura
Todo eso existe, es lo que yo he encontrado
Y esa ha sido mi perfección y mi regocijo,
Mi perfección ha sido tratar de cumplir con la de ellos
Mi perfección desde el primer momento
Desde el primer paso
Desde el primer deseo de ser tan bueno como ellos
Y ahí está siempre esa mano extendida,
Siempre dispuesta a dar toda fuerza y guía
El imperfecto no puede más que seguir al perfecto.